Ricardo Javier y Ana María

Son pareja desde el 3 de enero de 2011

Desde el momento en el que recibí su perfil, vi algo especial en su sonrisa que me llamo la atención. Nuestro primer contacto fue en el mes de octubre del pasado año. Nos enviamos la primera sonrisa y los primeros mensajes. Desde el principio hubo mucha complicidad en nuestras conversaciones, conectábamos muy bien y hablábamos el mismo «idioma». Nuestro contacto empezó a ser diario a partir de primeros de año, cuando ella regresó de un viaje a China. El tiempo corría y a nosotros las horas se nos hacían segundos, nos encontrábamos muy cómodos el uno con el otro.

Yo soy de Valladolid y Ana es de Madrid, un paseo de nada. Por eso mismo ella, que es mucho más valiente que yo, pegó el cañonazo y me dijo que por tomar un café juntos no se perdía nada y que no tenía problema en venir a Valladolid. Lógicamente, como caballero castellano que soy, le contesté que de ninguna de las maneras. Si alguien tenía que hacer ese primer desplazamiento sería yo.

Y así fue cómo a las 10:37 de una fría mañana de enero de 2011 llegaba yo a la estación madrileña de Chamartín. Nada más verla sabía que la besaría y en ese instante sabría si la amaba. Y resultó que ya la amaba desde antes de besarla. Desde entonces no he parado de besarla y de amarla, a su lado he recuperado todas las ilusiones de la vida. Estamos muy enamorados y se nos nota. A su lado soy el hombre más feliz del mundo.

Un saludo afectuoso para todos.